Con más de 200 invitados se realizó en Caracas, Venezuela, la “Cumbre Internacional contra el Fascismo”. Las jornadas se abocaron al análisis geopolítico, la comunicación y las diferentes expresiones organizativas entre ellas las experiencias de feminismos populares tanto en el país anfitrión como en otras partes del mundo.
El evento a cargo de la Cancillería venezolana, en conjunto con el Instituto Simón Bolívar para la Paz y la solidaridad entre los pueblos, contó en su apertura con las palabras de Félix Plasencia, ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores. El dirigente abrió el debate en la “Casa Amarilla Antonio José de Sucre” con una invitación a reflexionar sobre las consecuencias de las políticas imperialistas de EE.UU. en el mundo.
Se pudieron escuchar experiencias de bloqueo contra Venezuela y del avance de lógicas y métodos fascistas en distintos países, así también como un análisis del conflicto Rusia-Ucrania, el actual escenario de Chile, Nicaragua, Brasil, Colombia y diversos países de África, entre otros.
Por un mundo multipolar
En el encuentro de apertura participaron referentes de Chile, Brasil y EE.UU. El análisis invitó a pensar las diferentes formas en las que se expresa el fascismo diferenciando el proceso desarrollado en Europa del gestado en América Latina y el Caribe.
La socióloga marxista Sabrina Fernandes de Brasil señaló que la identidad que adquiere el fascismo y también su significado cambia “si nos paramos en el Norte o en el Sur”. Mientras que en el primero se entiende como un proceso de soberanía atado a la construcción de una identidad nacionalista, en el sur es una amenaza directa a la soberanía donde, si bien se usan los símbolos o identidades nacionales, es un “nacionalismo débil” subsumido y funcional al imperialismo.

Esta articulación entre fascismo e imperialismo, analizó Fernandes, se fue construyendo debido a la larga historia de robo de recursos que sufrieron y sufren los pueblos en la región, y que se da por el tipo de posición que ocupa América Latina en el sistema de producción capitalista. Una posición periférica, de subdesarrollo o, bajo el prisma de la teoría marxista de dependencia, lo que se define como una “posición de capitalismo dependiente”, que junto con la crisis ecológica actual da lugar, a lo que la especialista refirió como “Ecofascismo”.
El desafío y la tarea del porvenir tendrá una doble agencia según Fernandes, por un lado, cuidar los recursos, pero también nacionalizarlos para proteger la soberanía. Desde su perspectiva, toda tarea antifascista debe ser antiimperialista y de economías sostenibles. Donde será necesario la diversificación de la matriz energética y para ello fortalecer y reactivar los proyectos de integración regional, volver a la idea estratégica de un mundo multipolar.
Comunicación antibloqueo y antifascista
En el transcurso de los días en que se desarrolló la Cumbre también sucedió el Foro Internacional de Medios Alternativos, por lo que se dio un encuentro de ambos espacios para debatir la comunicación alternativa y popular frente al cambio de época.
Este se realizó el “Día de la Comunicación Popular” que, en Venezuela, se celebra el 12 de abril y recuerda los hechos ocurridos en 2002, cuando la derecha que organizó el intento de golpe de Estado contra el presidente Hugo Chávez había interrumpido los canales de comunicación en todo el país dejando al pueblo venezolano incomunicado y sin noticias.

Allí intervinieron diferentes representantes del mundo como el mexicano Fernando Buen Abad, el viceministro venezolano de Políticas Antibloqueo, William Castillo, y el intelectual español Juan Carlos Monedero, entre otros y otras periodistas e intelectuales. Durante el intercambio se analizó el comportamiento de las multinacionales mediáticas y el abordaje científico de las formas de comunicación en el mundo.
Por su parte la rectora de la Universidad Internacional de la Comunicación, Tania Díaz, reflexionó al cierre de la jornada festejando estos encuentros y sosteniendo que hay que recuperar la comunicación humana. Convertirse en “pueblo comunicador”, garantizar el protagonismo de la gente, “hacer de la política un hecho extraordinario, que esté vinculado a una mejor vida, recuperando la utopía y los sueños”.
“Es una tarea de abril, es una tarea que al pueblo venezolano le permitió no quedarse pensado en tragedias y decir ‘con Venezuela no, no pasarán, nosotras y nosotros venceremos y la humanidad toda con nosotros y nosotras’”, expresó Díaz. “Entonces el rol de los medios alternativos y populares fue y es muy relevante para pensar una comunicación antibloqueo y antifascista”, completó.
Por un Feminismo Popular y Revolucionario
Pensar en la lucha contra el fascismo, es pensar en las formas de organización popular que en la Patria Grande se están gestando. En esta línea, durante la cumbre se dieron dos espacios para pensar el movimiento feminista, y en particular reflexionar sobre el Feminismo Popular como vector de organización actual.
Durante el último día se reunieron las delegadas internacionales con la ministra del Poder Popular para la mujer y la Igualdad, Diva Guzmán, donde se intercambiaron experiencias de los diferentes países y la funcionaria reflexionó sobre los desafíos de su gestión frente a un proyecto que busca profundizar la perspectiva de género en todo el país.

También se realizó el Encuentro «Feminismos Populares y la lucha Antifascista», organizado por el Instituto Simón Bolívar para la Paz y la Solidaridad entre los Pueblos donde las representantes de Venezuela abordaron un diagnóstico y proyección de la realidad política del país. También presentaron algunas claves para pensar el Feminismo Popular Revolucionario, gestado desde las bases comunales que fueron clave de organización para Chávez y donde hay mayoría de representantes son mujeres. La interlocución estuvo a cargo Rebecca Madriz, de la Fundación Género con Clase, Yekuana Martínez, de la Plataforma Quinta Ola, Laura Franco, por el Instituto Simón Bolívar y Andreína Tarazón, representante del Todas Venezuela y ex ministra del Poder Popular de la Mujer y la Igualdad.
Un Pueblo con memoria y Revolución
En estos días también se recordó el levantamiento popular que tuvo lugar en Venezuela en defensa del proyecto Bolivariano en el 2002 donde la derecha venezolana en alianza con sectores concentrados de poder buscaba derrocar a Hugo Chávez. Una conmemoración a los 20 años de lucha, resistencia y construcción de memoria de un pueblo que salió a las calles ante el intento fallido del Golpe de Estado.
Con un encuentro entre el presidente Nicolás Maduro y las delegaciones internacionales, más una marcha que convocó a todos los sectores del país y organizaciones de izquierda de diferentes partes del mundo, se conmemoró una hazaña que el pueblo venezolano y la fuerza armada, en unión cívico-militar recuerda todavía hoy con amor, lucha, resistencia y responsabilidad histórica.