El viernes 10 de junio a última hora el Tribunal Primero de Sentencia Anticorrupción de La Paz, capital de Bolivia, condenó a Jeanine Añez a 10 años de prisión. Fue hallada culpable de los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes mientras ocupaba el cargo de senadora en noviembre de 2019.
Los hechos investigados en la causa llamada “Golpe de Estado II” corresponden a los días previos e inmediatamente posteriores a la destitución por la fuerza del entonces presidente Evo Morales y su vicepresidente Álvaro Linera. Añez era en ese momento vicepresidenta segunda del Senado y asumió la titularidad de la Cámara Alta -ubicándose así como primera en la línea de sucesión- en una asamblea sin quórum ya que se le impidió el ingreso a la bancada mayoritaria del Movimiento al Socialismo (MAS).
El tribunal condenó también a 10 años al excomandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, Williams Kaliman y al excomandante general de la Policía, Vladimir Calderón, ambos partícipes del derrocamiento de Morales.
En las principales ciudades del país como La Paz, Cochabamba y Sucre se habían instalado vigilias a la espera de la sentencia. Allí se hicieron presentes víctimas de la dictadura y partidarios del actual gobierno.
“Hemos iniciado un primer paso en la recuperación de la Memoria, Verdad y Justicia, nunca más un golpe de Estado en el país”, declaró el ministro de Justicia de Bolivia, Iván Lima, al conocer el fallo. Asimismo, mediante un comunicado oficial recordó que el juicio contó con la veeduría de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) verificó el respeto a los derechos y garantías de Añez.
Estas declaraciones son una respuesta tácita a una carta -emitida antes de la resolución judicial- firmada por 23 ex mandatarios de derecha de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA) en respaldo a la ex dictadora.
El español José María Aznar, los mexicanos Vicente Fox y Felipe Calderón y el argentino Mauricio Macri, entre otros, consideraron la intención de sentenciarla como una decisión “arbitraria, abusiva, ilegal e inconstitucional”. «La expresidenta está detenida ilegalmente. Estando detenida se le abrió este proceso carente del mínimo fundamento”, consideraron.
Áñez fue arrestada en marzo de 2021 acusada de delitos de terrorismo, sedición y conspiración. Esta causa es la denominada “Golpe de Estado I” y todavía no llegó a su fin. Allí se pretenden juzgar sus acciones al frente de la presidencia del país, momento en el que se cometieron las masacres de Sacaba y Senkata, entre otros hechos represivos.
Las municiones argentinas
La condena a Añez llegó la misma semana que se conoció nueva información sobre el envío de armamento por parte del gobierno argentino a cargo de Mauricio Macri, a la dictadura boliviana. El propio gobierno de Bolivia informó el lunes pasado que las municiones que viajaron el 13 de noviembre de 2019 a proteger la sede diplomática argentina, terminaron en manos de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) y la policía local.
La documentación que prueba el desvío del material bélico fue enviada al juzgado que encabeza Alejandro Catania y que lleva adelante la investigación que implica al ex presidente Macri, su jefe de Gabinete, Marcos Peña, y sus ministros de Seguridad, Patricia Bullrich, y Defensa, Oscar Aguad. Hasta ahora las pruebas solo habían sido aportadas por el gobierno argentino que impulsó la denuncia a través del actual ministro de Justicia, Martín Soria.
Según reconstruyeron Felipe Yapur y Luciana Bertoia en Página/12, las municiones llegaron a Bolivia la madrugada del 13 de noviembre y “nada de lo que ingresó desde la Argentina fue controlado: la Aduana boliviana informó que no halló registros”.
Sin embargo el coronel boliviano Oscar Burgos Gutiérrez, encargado de recibir el material, hizo un inventario: 40 mil cartuchos 12/70, 50 granadas de gas CN, 19 granadas de gas CS, 52 granadas de gas HC, gas MK9 y gas MK4.
Esto se suma a las 29.600 balas antitumulto que también llegaron ese día dando un panorama de la colaboración del gobierno de Macri con los golpistas.