El mundo Oct 29, 2022

¿Por qué los cohetes salen para el costado?

Si el espacio queda “para arriba”, ¿por qué los lanzamientos no van en esa dirección?

Es cierto que el espacio está “para arriba”. De hecho, la frontera entre la atmósfera terrestre y el espacio exterior está en lo que se llama la línea de Kármán, es decir 100 km sobre el nivel del mar.

A esta altura la atmósfera es tan fina que ningún avión podría mantenerse en vuelo. Es que estos llevan su combustible, en general kerosene refinado, pero aprovechan el oxígeno como comburente para lograr la combustión que los mantiene volando. Sin atmósfera no hay oxígeno, sin oxígeno no hay combustión, sin combustión no hay empuje y sin empuje no hay sustentación. 

Los cohetes difieren de los aviones en un importante punto: llevan su propio oxígeno. Es que para lograr la tan deseada combustión en el vacío del espacio no podemos usar nada más que lo que llevemos con nosotros. Por eso si alguna vez cortamos un cohete al medio, primero que nada seguro que nos meten presos… pero también veremos que tienen no uno sino dos tanques: uno para el combustible y otro para el oxígeno. En honor a la verdad, a veces usan otro tipo de sustitutos para el oxígeno, pero el rol de comburente está.

¿Pero cómo hacen las naves espaciales para permanecer viajando cuando este combustible y/o comburente se acaba? Para eso entran en órbita.

Para ver de qué se trata esto, hagamos el siguiente experimento mental. Si lanzamos una pelota hacia adelante, describirá una parábola hasta caer al piso. Si la lanzamos un poco más fuerte, caerá más lejos. ¿Qué pasa si la lanzamos muy fuerte? En ese caso, a medida que la pelota avanza y va cayendo, la curvatura de la tierra hace que el piso se aleje de ella. En otras palabras, la pelota nunca pararía de caer. Esta pelota acaba de entrar en órbita.

Por supuesto que con el rozamiento del aire, la pelota eventualmente frenaría y caería. Por lo tanto esta idea de permanecer en órbita requiere que la pelota además de ir muy rápido hacia adelante se encuentre también muy alta en donde (casi) no hay atmósfera.

Tenemos entonces los dos principios que necesita un cohete para ser lanzado con éxito: llegar muy alto y obtener una velocidad lateral muy grande. Por eso los cohetes son lanzados hacia arriba pero rápidamente se los ve virar hacia el costado. Y es que si fueran exclusivamente para arriba, caerían por acción de la gravedad en el mismo puerto de lanzamiento en cuanto se quedan sin combustible. Por el contrario, un cohete que alcanza órbita puede permanecer allí por años o incluso décadas (y por ende se habla de basura espacial, tema para otro día).

Tim Dodd, un famoso divulgador espacial y youtuber lo resume muy simpáticamente: “Para ir al espacio hay que ir para arriba, para quedarse en el espacio hay que ir para el costado”.

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