Amor en tiempos fascistas
Pasó el 14 de febrero y como efeméride cultural se desborda en contenido frente a la inmensa dimensión del Amor. No entra en un día porque el Amor es en todos los tiempos y vale mucho explorar el que nos toca vivir.
Pasó el 14 de febrero y como efeméride cultural se desborda en contenido frente a la inmensa dimensión del Amor. No entra en un día porque el Amor es en todos los tiempos y vale mucho explorar el que nos toca vivir.
La vuelta del ajuste salvaje con la excusa de frenar la inflación constituye otra fenomenal transferencia de ingresos de los sectores populares hacia la verdadera casta: el 1% más rico del país que busca restaurar sin gradualismo su poder de clase.
Si el barrio es cada vez menos comunidad y el trabajo es cada vez menos ordenador estable, ¿qué queda en pie?
La vigilia parece pesadilla. La realidad imita los más siniestros memes. Javier Milei y Victoria Villarruel son gobierno. Fueron elegidos por voto popular y agitando un programa de superexplotación, miseria, entrega y muerte. ¿Qué hacemos con esto? ¿Cómo levantarse todos los días y seguir viviendo en sociedad? ¿Seguimos viviendo en sociedad?
En el actual contexto de avances reaccionarios, pensar que si hay hambre las demandas del feminismo son "hipócritas" es grave cuando surge del campo popular y es un juego de suma cero en el que perdemos todes. Menos la derecha que ve replicar sus lógicas por izquierda.
Recuperar la trayectoria interrumpida de un mundo que podía ser libre para volver a pensar la revolución, en un tiempo no revolucionario.
Con el ajuste no hay paz, pan, tierra, techo y trabajo.
Las últimas semanas estuvieron marcadas por episodios que modificaron de manera notable el mapa del gobierno y el Frente de Todos. Se fue el ministro de Economía y se profundiza el espiral inflacionario y la inestabilidad cambiaria. Silvina Batakis tiene que lidiar con un acuerdo con el FMI que estrecha el margen de maniobra.
La modificación de la Ley de Alquileres que será tratada en la Cámara de Diputados tiene incisos que implican una regresión hasta la época de la última dictadura.
La emergencia de la extrema derecha canaliza miedos y enojos hacia un sistema político que no brinda respuestas a los problemas de la gente. Pero a la vez representa un retroceso que pone en riesgo las libertades básicas.
Las formas de precarización laboral han variado y se han profundizado con el tiempo. Sin embargo el movimiento obrero tiene historia y experiencia para ponerse de pie y aportar en el objetivo de recuperar los derechos y el gobierno de la capital del país.
Juan Grabois y el empresario sojero se mostraron juntos en un encuentro realizado en la Universidad de Córdoba. El dirigente social defendió esa alianza, omitiendo la complejidad y las consecuencias que implica el agronegocio en los distintos territorios.